GONZÀLEZ DE BERROCAL HERNAN
Hijo del capitán Pedro Carrillo Dávila (el Viejo). Quizá fue pariente de
Catalina González, viuda, que vivía en el verano de 1594 en Colotlán. Marido
de María Cid, y por ser ella -probablemente- media hermana del capitán
mestizo Miguel Caldera, cuñado de éste.
Hernán González y María Cid prestaron valiosa ayuda financiera y de otra
índole a Caldera durante sus años de lucha como soldado raso. La deuda
acumulada con estos parientes llegó a ascender a los 12,000 pesos, los
cuales, mediante su testamento, Caldera mandó que se los pagaran. Miguel
tuvo especial cariño y confianza a Pedro Cid, hijo de María y de Hernán,
nacido antes que se casaran, el cual llegó a ser su heredero principal.
Hernán y su mujer residían en Colotlán desde 1582. El 30 de abril de 1590 en
la ciudad de México, por influencia del capitán Miguel Caldera, el virrey
Don Luis de Velasco nombró a Hernán González Berrocal, caudillo del presidio
de Colotlán y protector de los indios que estaban estableciéndose en paz
alrededor del pueblo, y para recibir y distribuir entre ellos las ropas y
los abastos que se les estaban enviando. Por este trabajo recibió 500 pesos
anuales. Además, estaba supervisando a los trabajadores indios en el nuevo
convento franciscano del lugar y en las tierras agrícolas. Estuve ejerciendo
su cargo en el verano de 1592 y probablemente hasta 1595, cuando, junto con
fray Melchor Bravo de Lagunas, visitó en abril Zacatecas, para presentar al
teniente de capitán general Vicente de Zaldívar y Mendoza, una larga
requisición en que pedían más alimentos, ropa, herramientas y semillas para
los nuevos pobladores indios de Colotlán. El mismo día, Zaldívar y Mendoza
ordenó a Juan de Monroy, proveedor de Zacatecas, entregar a González de
Berrocal todas las herramientas que exigía, más una gran cantidad de ropa.
Junto al capitán Gabriel Ortiz de Fuenmayor, Juan de Mora, clérigo, y Juan
de Zavala, fue nombrado albacea del capitán Miguel Caldera, en su
testamento, del 2 de noviembre de 1596, otorgado en las minas de San Luis.
En un codicilo, otorgado el 18 de diciembre en el mismo pueblo, Caldera
revocó a los albaceas nombrados y dejó de nuevo a Hernán González de
Berrocal, y junto con él, a Alonso Carrillo, comerciante y minero, Juan de
la Torre y Pedro Carrillo Dávila, el Joven, marido de María González, hija
de la media hermana del capitán. A estos cuatro albaceas, también les asignó
una parte de su herencia.
Probablemente a principios de 1597, González de Berrocal viajó a las minas
de San Luis. El 20 de septiembre de 1597, en las minas y el pueblo, como
apoderado de su cuñado, hizo una triunfal defensa de las denuncias mineras
del capitán en el Cerro de San Pedro y sus alrededores, porque algunos
mineros de San Luis habían negado a Caldera el derecho de poseer minas en
aquel distrito. El alcalde mayor aprobó la propiedad de Caldera, después de
esta intervención (Amaya Topete, 1951: 30; Powell, 1980: 130, 178, 191,
227-229, 262, 278, 281, 284, 303, 305, 308s y 313s; Sego, 1998:131n y 134s).
. L.de la Torre Berumen, EN TORNO A LA HACIENDA DE SANTIAGO DE EL CUIDADO.
2. Thomas Hillerkuss, Diccionario Occidente Novohispano.
--
Kutsaraipa: Lugar Mítico donde se Reunieron los Antepasados
SALVADOR CABRAL VALDES
http://jerez-zacatecas.galeon.com
http://club.telepolis.com/letorre/
http://jerezzacatecas-salvador.blogspot.com/
http://club.telepolis.com/jerz/
http://jerez-zacatecas.blogdiario.com/
http://jerez-zacatecas.blog.galeon.com/
http://jerezzacatecas.galeon.com/